· Menos doloroso que el uso de cremas y vendajes, regenerando piel en 21 días
Un estudio* realizado en Brasil ha demostrado que pacientes con quemaduras tratados con la piel de la tilapia han obtenido una cicatrización más rápida, contrario a los que son tratados con métodos tradicionales.
Y es cabe destacar que la piel de la tilapia es rica en ácidos grasos, colágeno tipo I y III, y con capacidad para retener la humedad, se ha convertido en una alternativa prometedora para el tratamiento de quemaduras.
Antes de ponerlo en la quemadura la piel del pez es sometida a un proceso de limpieza en el que se le quitan las escamas, el tejido muscular, las toxinas y el característico olor a pescado.
Luego se la estira en una prensa y se la corta en tiras de 10 cm por 20 cm. El resultado es una piel flexible, similar a la piel humana.
La piel de la tilapia, tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, esto mejora la curación de heridas, quemaduras y úlceras diabéticas. Este innovador vendaje de piel de pescado representa un avance prometedor en el tratamiento de quemaduras.pic.twitter.com/jSkcSa5v3z
— Comunidad Biológica (@Bio_comunidad) March 4, 2024
La piel de tilapia se coloca de forma estéril en las zonas afectadas por quemaduras y puede permanecer sin ser retirada hasta 10 días. Además estos pacientes han consumido menos analgésicos debido a su aplicación.
Ahora bien, señala el estudio brasileño publicado que la piel de tilapia favorece la fase proliferativa de la cicatrización, aumentando la migración y regeneración celular.
La deposición de fibras de colágeno se observa alrededor del séptimo día, el epitelio se regenera completamente en dos semanas, y las heridas tratadas curan por completo alrededor del día 21.
*En la investigación, premiada en Brasil por el Congreso Brasileño de Cirugía Plástica y el Congreso Brasileño de Quemados, participaron 46 investigadores. Entre otros los doctores Marcelo Borges, Odorico Moraes, Nelson Piccolo y las doctoras Elisabete Moraes, Tereza Bandeira, Ana Paula Negreiros, Andréa Pontes y Mônica Mathor. Las instituciones involucradas son: el Instituto de Apoyo al Quemado, la Universidad Federal de Ceará (UFC), el Núcleo de Investigación y Desarrollo de Medicamentos (NPDM), el Instituto José Frota y la empresa Enel, que financió la investigación.